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Capasu otra desatención trágica

By on diciembre 6, 2016

 

 

Diciembre 2016

Por: Gabino González Quintana

 

Una joven, madre soltera, trabajadora de una empresa gasolinera ubicada al sur de esta Ciudad, perdió la vida el día de miércoles 30 de noviembre cuando se encontraba hospitalizada en el hospital del Seguro Social, a consecuencia de las lesiones que sufrió cuando se accidentó al dirigirse a su trabajo el pasado martes 29; hacía su trayecto en el libramiento oriente por el carril norte-sur, a unos metros de la calzada la fuente, justo donde se desde las últimas dos semanas se realizan obras de introducción de tubería por parte de la Comisión de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento de Uruapan (CAPASU).

Que lamentable noticia, dejó dos bebés en la orfandad.

Resulta muy lamentable también, que habiéndose accidentado poco antes de las 6 de la mañana, (porque su ingreso al trabajo es a las 6:00) ella recibió atención de primeros auxilios cerca de las siete de la mañana por parte de protección civil municipal,  habiendo sido canalizada al Hospital Regional para su estabilización. Es decir, permaneció ahí, a la deriva, tirada en el pavimento y con fuertes golpes en el cráneo y ninguna autoridad se solidarizaba con ella, solo dos taxistas que la resguardaron y pidieron el apoyo de las distintas corporaciones policiacas y de socorro, pero tuvieron respuesta mucho tiempo después.

No se trata de buscar culpables, pero si responsables.

Hay imágenes certeras que evidencian lo pudo haber provocado el accidente; y es que ahí hay una obra de introducción de tubería que desde las últimas dos semanas se realizan en el lugar por parte de la CAPASU y no tenía señalamientos precautorios ni abanderamiento, ni nada, lo que si había era una zanja mal tapada, grava suelta y un riesgo de que pudiera ocurrir un accidente, como fue el caso.

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Y la autoridad vial ¿dónde estaba?

Es de destacar que a la escena del accidente nunca llegaron elementos de tránsito municipal, nunca protegieron a la persona que se encontraba gravemente lesionada y al parecer tampoco se levantó un peritaje del accidente; a raíz de esta desatención y grave omisión oficial, los familiares de la persona hoy fallecida no cuentan con elementos para coadyuvar con la fiscalía a que se esclarezca este fatal accidente, y nos preguntamos también, ¿Por qué no llegó ninguna autoridad?

La motocicleta en que viajaba Bianca Marisol Chapa Aguirre, como se llamó la hoy occisa, también desapareció, según versiones de la sociedad “se la robaron” al poco rato que la ambulancia se alejó y los vecinos solidarios también dejaron el lugar; se dice que solo la circundaron con tabicones que había en el lugar para que no fuera haber otro impacto con la unidad que se había quedado tirada sobre el pavimento.

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Negligencia e irresponsabilidad

Tras conocer del trágico accidente en las redes sociales, las quejas y reclamos de la población no se hicieron esperar, llamamientos de atención para el organismo operados del agua en Uruapan, así como para su director Juan Daniel Manzo Rodríguez, por la falta de atención a los trabajos y la nula señalización y precaución, ahora la gente reclama que se le pague a los deudos como es su obligación, decían por la grave omisión e irresponsabilidad.

Ante esta serie de reclamos sociales, la CAPASU publicó en su página de internet que “desde el accidente tanto la empresa constructora como el organismo operador, hemos mantenido constante comunicación con los familiares en un acto de plena solidaridad y auxilio y de ayuda en sus necesidades”. Ello fue desmentido por familiares de Bianca Marisol, lo que indica que fue un engaño de Juan Daniel Manzo Rodríguez y el organismo que representa; de forma insolente quisieron engañar a la sociedad haciendo creer que de verdad querían apoyar a la familia lastimada, pero no era así.

Por los infantes que deja en la orfandad Bianca Marisol, ésta familia requiere de ayuda legal, asistencia para reclamar lo que en derecho les corresponde máxime ahora que ya no está quien luchaba por ellos.

No faltarán los defensores envanecidos que sistemáticamente defienden a este tipo de instituciones, a tratar de desmentir lo que se ha sabido de este lamentable suceso, pero, la historia pondrá en el sitio que le corresponde a cada quien y su conciencia no los dejará tranquilos.

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