- Uruapan se llena de color e identidad con el Tianguis Artesanal de Domingo de Ramos
- NO TE EQUIVOQUES MAS, MORENA
- AMOR, CON AMOR SE PAGA
- Tianguis Artesanal nos une y nos da identidad: Nacho Campos
- Gran fiesta futbolera en partido de leyendas en Uruapan
- Lanzan licitación para cablebús en Uruapan
- Con programas de Bienestar, disminuye pobreza en Michoacán
- Uruapan, en la ruta de la transformación
Esa supuesta libertad de expresión
Silvia Guadalupe Garza Galván |
El pasado 3 de mayo se conmemoró el Día Mundial de la Libertad de Prensa. Tres aspectos resultan particularmente relevantes a la hora de conmemorar esta fecha. Debemos reconocer y exigir el principio fundamental de la libertad de prensa como lo que es: un derecho, no se trata de una concesión de un Gobierno “tolerante” u algo optativo. Se trata de un derecho que tenemos en cualquier sociedad democrática. En segundo lugar, nos da la oportunidad de evaluar el estado presente de la libertad de prensa en el mundo y particularmente en el país. En tercero, dada la evaluación anterior, hacemos una defensa de este derecho fundamental mientras rendimos homenaje a aquellos periodistas que han perdido la vida en la labor de informar a la ciudadanía. Así podemos dar inicio a nuestra reflexión sobre la libertad de prensa.
¿Qué quiere decir libertad de prensa en sí? Se trata de las garantías que tienen los ciudadanos para crear contenidos y propagar ideas e información sin la interferencia ni censura del Estado. Se trata de una protección frente al Estado para poder expresar libremente las ideas en medios de comunicación y, sobre todo, de informar sobre aquellos sucesos que si no fueran informados, permanecerían ocultos en las tinieblas de la impunidad; esa es la principal virtud y fuerza de la libertad de prensa y también es la principal amenaza de un gobierno corrupto y/o represor.
A la prensa se le ha llamado “El Cuarto Poder” puesto que, en una sociedad democrática los medios de comunicación tienen, en forma ideal, la labor de ser vigilante de las actividades del Estado. Esto quiere decir que sirve de contrapeso o contrapoder al servicio de la ciudadanía, ya que la información es poder; saber lo que ocurre es la diferencia entre la propagación de la impunidad y la corrupción, o la justa rendición de cuentas.
En este país, si evaluamos la situación presente de la libertad de prensa, nos encontramos con cifras y hechos realmente alarmantes. Según un informe reciente de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), México es el país más peligroso para ejercer el periodismo en el continente, pues uno de cada tres asesinatos documentados de 2010 a noviembre de 2015 se cometieron en nuestro país.
Por otra parte, la Comisión Nacional de Derechos Humanos reporta que entre enero de 2000 y mayo del 2015 se cometieron 100 homicidios de Periodistas; 21 desaparecidos desde 2005 y desde 2006 ha habido 45 atentados contra medios de comunicación.
En cuanto a la impunidad con respecto a los asesinatos a periodistas, de acuerdo al Índice Global de Impunidad, elaborado por el Comité para la Protección de Periodistas, México ocupa el oneroso séptimo lugar a nivel mundial y el primero en Latinoamérica de 13 países donde periodistas son asesinados y los homicidas o autores intelectuales no han sido capturados o procesados legalmente. Para llevar a cabo esta
evaluación, se toman en cuenta los asesinatos contra periodistas entre las fechas de 2004 a 2013 y únicamente se toman en cuenta los países con cinco o más casos sin resolver. Otro dato alarmante a considerar para la inclusión de México en este listado, es que nuestro país es el único de la lista que no ha pasado en años recientes por un conflicto armado o guerra civil.
En cuanto a los estados del país, Veracruz se ha vuelto uno de los estados más peligrosos para el periodismo, donde decenas han sido asesinados, además de activistas de derechos humanos. Después de Veracruz, le siguen en esta terrible lista los estados de Tamaulipas, Michoacán y Guerrero.
Cabe destacar en fechas recientes el asesinato de la periodista Anabel Flores en Veracruz, donde el gobernador Duarte asegura que este caso, como ya muchos otros son cometidos por el crimen organizado. Así, en su cuenta de Twitter, afirmó en fechas recientes que: “salvo el homicidio de la periodista Regina Martínez, corresponsal de la revista Proceso en Veracruz y fue asesinada a golpes en el baño de su casa en abril de 2012) los demás “han sido por el crimen organizado”, con lo que se deslinda de lo que ahora es una crisis estatal muy grave a la libertad de prensa.
Más cerca de casa, tenemos el ejemplo en fechas recientes de cómo elementos del grupo Fuerza Coahuila encabezaron un operativo en contra del director de una casa editorial de Saltillo, o la detención de un reportero de una estación de radio en Piedras Negras por parte de elementos de Seguridad Pública Municipal, ambas se suman a las agresiones “anónimas” contra los periodistas.
Este país tiene demasiados ejemplos sobre la represión a periodistas. La corrupción siempre buscará acabar con aquellos que amenazan su permanencia en la impunidad. Conmemoremos a todos aquellos que no callan, y sobre todo a aquellos que mueren o son violentados en este país por su noble labor de sacar a la luz la verdad. Defendamos la libertad de prensa, pues es uno de los bastiones más cruciales y el contrapoder más importante frente a los embates de la injusticia que vivimos día con día.
Amenazas, persecuciones, agresiones, definitivamente no podemos seguir así, mi solidaridad con todos los medios de comunicación.
You must be logged in to post a comment Login